El Día Europeo para el uso prudente de los Antibióticos
se conmemora el 18 de noviembre de cada año para sensibilizar a profesionales, instituciones, autoridades y población general de los países de la Unión Europea con el objetivo de alcanzar un uso más prudente de estos fármacos y disminuir su consumo innecesario.

¿Qué son los ANTIBIOTICOS?
Los antibióticos son medicamentos que impiden el desarrollo o destruyen los microorganismos, generalmente bacterias. El primer fármaco antibiótico, fué descubierto en 1928, al investigar Alexander Fleming en un hongo las propiedades de la Penicilina. Poco tiempo despues , se descubrieron las Sulfamidas, más tarde la Estreptomicina y con el tiempo cientos de antibióticos naturales o sintetizados en laboratorio.
¿Qué son las RESISTENCIAS A LOS ANTIBIOTICOS?
Son mecanismos de defensa que generan las bacterias contra los antibióticos disminuyendo la eficacia clínica de los mismos.
El poder de acción de los primeros antibióticos era limitado (espectro reducido) pero con tiempo se han desarrollado otros de amplio espectro, con mayor potencia microbicida, capaces de llegar a todas las partes del cuerpo y de administración y posología más cómoda.
El uso de antibióticos de alto espectro inadecuadamente, en dosis insuficientes o pautas inadecuadas, elimina las bacterias más sensibles, seleccionando las resistentes. De ellas, las denominadas superbacterias se han hecho resistentes a la mayoría de antibióticos existentes. Provocan infecciones graves y muy difíciles de manejar que requieren tratamientos combinados de elevado gasto sanitario; aún así pueden producir graves secuelas, incluso la muerte, sobre todo en pacientes inmunodeprimidos.
¿Qué es el USO RACIONAL de los ANTIBIOTICOS?
Es el uso ajustado de los antibióticos ante infecciones bacterianas, aplicando protocolos consensuados por las diversas sociedades científicas.
¿Cuál es el PAPEL DEL CLINICO en el USO PRUDENTE DE LOS ANTIBIOTICOS?
La mayoría de procesos infecciosos banales tanto en niños como en adultos están ocasionados por microorganismos de origen viral, por lo que no es lógico utilizar antibióticos contra ellos, salvo en infecciones específicas.
Ante un proceso clínico posiblemente infeccioso, hay que acudir a un profesional médico, que realizará un diagnóstico clínico y evaluará las pruebas complementarias oportunas, antes de indicar un tratamiento antibiótico bien empírico (cuando no se conoce el germen específico) o etiológico, cuando conocemos el microorganismo específico y/o la cobertura antibiótica a la que es sensible mediante cultivo/antibiograma.

Además de ello, no todo cultivo positivo, es indicativo de prescripción antibiótica. El facultativo debe analizar estos resultados junto con otros parámetros de laboratorio, así como la sintomatología del paciente. Hay bacterias que colonizan partes de nuestro cuerpo, pero sin ocasionar enfermedad; muchas de ellas son imprescindibles para mantener la salud e incluso evitan que otras bacterias dañinas ocupen su lugar.
–El uso prudente de los antibióticos es el empleo adecuado de los mismos ante infecciones bacterianas, aplicando protocolos consensuados por las diversas sociedades científicas.–
Aunque se pueden utilizar antibióticos para prevenir infecciones como en la antibioterapia preoperatoria o en sospecha de meningitis meningocócica casi siempre se debe evitar su uso preventivo e implementar otras medidas preventivas.
En definitiva, el único profesional que puede prescribir antibióticos es el facultativo siguiendo siempre pautas específicas. No se debe presionar a los médicos para administrar antibióticos.
En dermalicante le explicamos sus problemas dermatológicos de forma inteligible tratando de prevenir problemas futuros.